Logo Persis

Expertos trabajan en un sistema optimizado para filtrar microplásticos

Expertos trabajan en un sistema optimizado para filtrar microplásticos

Expertos valencianos trabajan en el diseño de un sistema optimizado para filtrar microplásticos, el cual está basado en el estudio del sistema de filtrado de especies mediterráneas como el pez manta, con un consumo mínimo de energía.

mantaraya_1.jpeg

El pez manta raya emplea un eficiente sistema de filtrado de microplancton para alimentarse. Vielca Ingenieros

Valencia, España.- Un equipo multidisciplinar de expertos trabaja desde Valencia en el estudio y diseño de un sistema de filtrado optimizado para eliminar microplásticos en las aguas. El proyecto, denominado REMOURE (Filtración de microplásticos según el modelo de captura en organismos marinos mediterráneos), ha sido seleccionado por la Agencia Valenciana de la Innovación, dentro del programa de 'Proyectos estratégicos en cooperación 2022'.

El proyecto pretende investigar el aparato de alimentación de diversas especies marinas que cuentan con una elevada eficiencia de captura de microplancton, para replicarlo y aplicarlo en la eliminación de microplásticos en sistemas de tratamiento de aguas residuales.

El consorcio que lleva a cabo este trabajo está compuesto por la ingeniería Vielca Ingenieros, Global Omnium Medioambiente, el instituto tecnológico Aidimme, la Universidad Católica de Valencia y la empresa Control de Vertido Industrial.

Según explica Vicente Candela, director-gerente de Vielca Ingenieros, "el reto consiste en desarrollar una nueva tecnología de bajo consumo energético para eliminar microplásticos en aguas residuales que permita disminuir el impacto en los medios receptores. La idea es que el nuevo dispositivo tecnológico permita optimizar el filtrado con un consumo mínimo de energía, y al mismo tiempo podamos optimizar su autolimpieza, evitando que se obstruya, uno de los escollos habituales en estos sistemas".

Dos años y una prueba piloto

El proyecto REMOURE cuenta con un presupuesto de 557 mil 824.04 euros, de los cuales la Agencia Valenciana de Innovación otorga una subvención no reembolsable de 385 mil 328.72 euros. El plazo para ejecutarlo es de dos años. Los trabajos a desarrollar comprenden desde la búsqueda de las especies marinas con mayor eficacia en la captura de microplancton (entre ellas el pez manta) hasta la elaboración de un piloto de pruebas de tratamiento de aguas residuales, pasando por la fabricación aditiva, la construcción de un banco hidrodinámico de ensayos o el modelado del flujo de fluidos con cálculo numérico (CFD).

Cada miembro del consorcio tiene encomendada una función específica. En el caso de Vielca Ingenieros, consiste en diseñar y construir un banco hidrodinámico de pruebas, que permita estudiar la incidencia de las líneas de corriente sobre los distintos sistemas de captura y evaluar sus rendimientos.

Todo el estudio se va a hacer desde Valencia y tiene como objetivo que el sistema sea viable y sostenible, con un consumo mínimo de energía. El canal de ensayos servirá para comprobar in situ el funcionamiento del nuevo dispositivo, con un modelo a escala reducida.

En el proyecto participan una quincena de expertos, entre ingenieros, biólogos y técnicos de diversas especialidades. Cuando el sistema esté listo y testado, la idea es situar una unidad en una planta depuradora de aguas, donde habitualmente encontramos una alta concentración de microplásticos. "Si tenemos éxito -concluye Candela- el siguiente paso sería la fabricación en serie de este dispositivo, que podría tener utilidad en muchas partes del mundo"

Un problema global

Al no tener capacidad para separar y retener los microplásticos debido a su pequeño tamaño, las plantas de tratamiento de aguas residuales liberan microplásticos al medio ambiente, donde se acumulan y representan una amenaza para la vida. Al plástico le cuesta cientos de años degradarse completamente, y durante ese tiempo las micropartículas pueden causar daños a una gran variedad de organismos.

La ingestión de microplásticos produce bioacumulación de contaminantes químicos en los peces, con el evidente peligro de su transferencia a la cadena trófica. Si a ello sumamos el vertido de contaminantes químicos al mar (entre 4 y 14 millones de toneladas de plástico cada año), convierte este problema en uno de los mayores retos medioambientales actuales.

Una resolución de la ONU pedía ya en 2017 a todos los miembros priorizar políticas que eviten que la basura marina y los microplásticos entren en el entorno marino. Este mismo año, el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente lanzó su campaña 'Mares Limpios', en la que anima a tomar medidas como prohibir el uso de microplásticos en cosméticos.

Cargando...
Load next