“Si te llegan a regalar un tulipán (cultivado en el Suelo de Conservación de la Ciudad de México) yo lo sentiría como un detalle muy especial hacia ti porque no vas a encontrar una flor tan magnífica, única, perfecta por los colores, la forma y elegancia que tiene y que solamente se da una vez al año aquí en México por la cuestión climática”, comenta Roberto Jesús Espinoza, floricultor de los Viveros Espinoza Nueva Generación.
Desde San Luis Tlaxialtemalco, en Xochimilco, Roberto asegura que por sus venas corre sangre de campesino: “Mi abuelo fue un tiempo floricultor, llegó a sembrar rosas, pensamientos, no me olvides; mi padre también es floricultor y yo, ahorita, estoy adentrándome a esta parte y en un futuro, no sé, cercano, pueda llegar a tener una familia, uno o dos hijos y que realmente a alguno de ellos le guste, le entre a lo que es el campo como lo hemos hecho nosotros”.
Rodeado de casi 12 mil macetas de tulipán holandés listas para comercializarse de manera directa en los Viveros Espinoza Nueva Generación, en el Mercado de Plantas de San Luis Tlaxialtemalco y en el local 128 de la Central de Abasto, en el área de follajes, el también beneficiario del programa Altépetl Bienestar, se dice honrado de ser productor del Suelo de Conservación.
“Es una maravilla porque das vida a una planta, a una semilla, a algo que mucha gente no lo llega a ver en su casa. En ocasiones la gente ya no ve cómo es una planta, una verdura, una fruta que llega hasta la mesa de su casa. Realmente en ocasiones no se llegan a dar cuenta del proceso que lleva esa planta desde pequeña para que pueda dar ese fruto”, expresa.
Este año, en el Suelo de Conservación de la Ciudad de México se ofrecen a las y los capitalinos 325 mil macetas de tulipán, conocido como “la flor del amor apasionado”. Este ornato es producido en las alcaldías Xochimilco, Tláhuac y Milpa Alta.
En los Viveros Espinoza Nueva Generación hay variedad de tulipanes: rosas, amarillos, rojos, bicolores, morados, blancos. Roberto invita “a todas las personas que lleguen a ver o a leer esto, que vayan a comprar un tulipán, ya sea en el Suelo de Conservación de Xochimilco, en algún mercado local o en algún mercado que esté a su alcance, es un bonito detalle que le va a alegrar la vida a esa persona que tanto quieres. Trabajar en el campo da tranquilidad, paz, alegría, te llenas de vida con solo ver una planta, conforme va creciendo tu planta que vas sembrando, tu semilla, tu esqueje. Nosotros, que somos ornamentales, llegamos a dar alegría a las personas con una flor, un detalle para el hogar para que se alegren, para que tengan más color en su vida”.