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Sedema registra aumento de avistamientos de especies en la CDMX

Sedema registra aumento de avistamientos de especies en la CDMX

La puesta en marcha del Programa de Monitoreo de la Biodiversidad de la Ciudad de México ha permitido registrar especies como la culebra terrestre del centro, el coyote en Tlalpan y Magdalena Contreras.

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Animales
Sedema de la CDMX

Ciudad de México.- En el marco de la conmemoración de los primeros 50 años de la proclamación del Día Mundial del Medio Ambiente, celebrado el pasado 5 de junio, la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) capitalina informó sobre el avistamiento de diferentes especies de interés en la Ciudad de México, como el coyote, el lince americano y la zorra gris, que habitan naturalmente en territorios de hábitat extensos y de alta calidad, por lo que podrían indicar la existencia de ecosistemas conservados y saludables.

El estudio “La biodiversidad en la Ciudad de México, 2016” refiere que en la Ciudad de México había 355 especies de aves, hoy en día gracias al entusiasmo de los observadores de aves y de acuerdo con el Índice de Biodiversidad Urbana, que aún está elaborándose en coordinación con diferentes áreas de la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio) y otros aliados, ya se tienen registradas alrededor de 397 especies que habitan y visitan la ciudad, es decir 42 nuevas especies.

En la Ciudad de México se han avistado hasta 18 especies de colibrís y entre ellas destacan dos especies, el colibrí barba negra (Archilochus alexandri) y el colibrí opaco (Phaeoptila sordida).

En Desierto de los Leones, gracias al Programa de Monitoreo de la Biodiversidad, hoy suman siete observaciones de Lince americano a través del uso de cámaras trampa; y hasta 2019 sólo se tenían tres registros en la ciudad. Eso significa que el monitoreo constante ha sido efectivo para generar información que permita el diseño de estrategias de conservación y la atención a factores de presión. Sin embargo, debido a su papel como depredadores tope, su presencia es una muestra de que la ciudad conserva ecosistemas saludables y biodiversos.

La zorra gris, también ha sido observada con mayor frecuencia, en 2019 solo se habían obtenido ocho registros y hasta ahora se cuenta con alredor de 27 observaciones en diferentes áreas de la ciudad. Otro registro que es importante, porque no existían registros en la ciudad antes de 2019, es el de coyote ya que ahora ha sido avistado al menos en siete ocasiones en diferentes zonas de las alcaldías Tlalpan y Magdalena Contreras.

El murciélago trompudo ha sido observado en la Sierra de Guadalupe y también en el Bosque de Chapultepec. El mirlo azteca, un ave rara de observar en la ciudad, ha sido registrada en la Sierra de Guadalupe, cabe destacar que es un ave endémica de México y sujeta a protección especial. Por otro lado, el Charrán de Forster ha sido observado en el Parque Ecológico Xochimilco; sorprendiendo a los observadores de aves durante la temporada de migración.

La polluela Sora, ha sido frecuentemente registrada en zonas de humedales de Xochimilco, incluyendo el Parque Ecológico. Entre otras especies interesantes recientemente observadas se encuentran el camaleón de montaña del valle de México en el Parque Ecológico de la Ciudad de México; el gavilán de Cooper en la Sierra de Guadalupe; la culebra terrestre del centro en Xochimilco; entre otras especies.

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Pato
Sedema de la CDMX

El registro de estas especies coincide con áreas en las que recientemente se han realizado diferentes intervenciones que se han implementado desde 2019 en la ciudad y que tienen el propósito de mejorar las condiciones socioambientales y de los esfuerzos que se están haciendo para el monitoreo de la biodiversidad.

Destaca la revegetación del suelo de conservación y suelo urbano con casi 28 millones de árboles y otro tipo de plantas que ofrecen recursos alimenticios y refugio, las rehabilitaciones socioambientales de las Áreas Naturales Protegidas y Áreas de Valor Ambiental, así como la limpieza y mejora de la zona lacustre de Xochimilco y Tláhuac. Todas estas labores han generado condiciones para conservar a estas especies y a la gran riqueza biológica que alberga la ciudad.

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