Abiyán, Costa de Marfil.- La 15ª Conferencia de las Partes (COP15) de la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación (CNULD), celebrada en Abiyán, Costa de Marfil, concluyó con un compromiso mundial conjunto para aumentar la resistencia a la sequía e invertir en la restauración de la tierra para la prosperidad futura.
Esta reunión de dos semanas sobre el futuro de la gestión de la tierra atrajo a cerca de 7 mil participantes, entre los que se encontraban jefes de Estado, ministros, delegados de las 196 Partes de la CNULD y de la Unión Europea, así como miembros del sector privado, de la sociedad civil, mujeres, líderes juveniles y medios de comunicación.
En su intervención en la ceremonia de clausura de la COP15 de la CNULD, Patrick Achi, Primer Ministro de Costa de Marfil, dijo "Cada generación se enfrenta a esta espinosa cuestión de cómo satisfacer las necesidades de producción de nuestras sociedades [...] sin destruir nuestros bosques y tierras y condenar así el futuro de aquellos en cuyo nombre nos esforzamos".
También llamó la atención sobre los 2 mil 500 millones de dólares recaudados para el Programa del Legado de Abiyán, lanzado por el Presidente de Costa de Marfil, Alassane Ouattara, en la Cumbre de Jefes de Estado del 9 de mayo, que ya ha superado los ,mil 500 millones previstos para el mismo.
En una conferencia de prensa, Alain-Richard Donwahi, Presidente de la COP15, destacó que era la primera vez que Costa de Marfil acogía una COP de una de las tres Convenciones de Río, y subrayó el compromiso constante de su país de mantener las cuestiones relativas a la tierra en un lugar destacado de la agenda internacional.
Ibrahim Thiaw, Secretario Ejecutivo de la CNULD, dijo:
"Reunidos con el telón de fondo de múltiples retos mundiales, entre ellos la peor sequía en 40 años en África oriental, así como las crisis alimentarias y económicas alimentadas por la actual pandemia de COVID-19 y los conflictos, los países han enviado un llamamiento unido sobre la importancia de una tierra sana y productiva para asegurar la prosperidad futura para todos".
Entre los nuevos compromisos destacan:
1.- Acelerar la restauración de mil millones de hectáreas de tierras degradadas para 2030, mejorando la recopilación de datos y la supervisión para hacer un seguimiento de los avances en el cumplimiento de los compromisos de restauración de la tierra y estableciendo un nuevo modelo de asociación para los programas de inversión integrada en el paisaje a gran escala;
2.- Impulsar la resiliencia a la sequía mediante la identificación de la expansión de las tierras secas, la mejora de las políticas nacionales y la alerta temprana, el seguimiento y la evaluación; el aprendizaje y el intercambio de conocimientos; la creación de asociaciones y la coordinación de la acción; y la movilización de la financiación de la sequía.
3.- Establecer un Grupo de Trabajo Intergubernamental sobre la Sequía para 2022-2024 con el fin de estudiar posibles opciones, incluidos los instrumentos políticos mundiales y los marcos políticos regionales, para apoyar un cambio de la gestión de la sequía reactiva a la proactiva.
4.- Abordar la migración y el desplazamiento forzados provocados por la desertificación y la degradación de la tierra creando oportunidades sociales y económicas que aumenten la resiliencia rural y la estabilidad de los medios de vida, y movilizando recursos, incluso de la diáspora, para proyectos de restauración de tierras;
5.- Mejorar la participación de las mujeres en la gestión de la tierra como importantes facilitadores de la restauración efectiva de la misma, abordando los problemas de tenencia de la tierra que suelen encontrar las personas en situación de vulnerabilidad, y recopilando datos desglosados por género sobre los impactos de la desertificación, la degradación de la tierra y la sequía;
6.- Abordar las tormentas de arena y polvo y otros riesgos crecientes de catástrofes, diseñando y aplicando planes y políticas que incluyan la alerta temprana y la evaluación de riesgos, y mitigando sus causas antrópicas en su origen;
7.- Promover empleos decentes basados en la tierra para los jóvenes y el emprendimiento juvenil basado en la tierra y fortalecer la participación de los jóvenes en el proceso de la CNULD; y
8.- Garantizar mayores sinergias entre las tres Convenciones de Río, incluyendo la complementariedad en la aplicación de estos tratados a través de soluciones basadas en la naturaleza y el establecimiento de objetivos a nivel nacional.
La COP15 de la CNULD es la primera Conferencia de las Partes de las tres Convenciones de Río que se celebra en 2022, antes de la COP27 de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático y la COP15 del Convenio sobre la Diversidad Biológica.