México.- Al inaugurar el foro “Producción forestal y consumo responsable: Un mecanismo de desarrollo sostenible y bienestar social para mitigar el cambio climático, la legisladora Martha Olivia García señaló que entre los funciones de la comisión está normar el uso de suelos con el propósito de aprovechar los beneficios de los recursos boscosos del país, pero de forma responsable.
Además, regular la oferta de bienes, la correcta integración en la cadena productiva forestal, reconocer el trabajo que realizan las personas en sus comunidades y fomentar las pequeñas cooperativas maderables.
Es necesario hacer una actualización a las leyes ambientales, en particular a la Ley General de Desarrollo Forestal Sustentable para que las comunidades encuentren en los bosques una forma de vida digna.
El también secretario de la comisión, José Guadalupe Ambrocio Gachuz (Morena) sostuvo que es necesario hacer una actualización a las leyes ambientales, en particular a la Ley General de Desarrollo Forestal Sustentable para que las comunidades encuentren en los bosques una forma de vida digna.
Expresó que la conservación de las áreas boscosas no sólo contribuye a la mitigación del cambio climático, sino que permite captar agua y dióxido de carbono.
En su intervención, Andrés Ávila Akerberg, director general de Política y Legislación Ambiental, AC (Polea) apuntó que en el país cerca de 11 millones de personas viven en los boques y casi la mitad de este territorio son propiedad ejidal.
Subrayó que, de Acuerdo con el Instituto Nacional de Ecología, el costo bruto de no preservar los ecosistemas no sólo generaría que aumentará la temperatura, sino que se tendría una pérdida económica de 143 mil millones de dólares (mmdd), mientras que para reducir el índice de emisiones de dióxido de carbono se deben invertir cerca de 126 mmdd, por lo que el costo neto sería de 17 mmdd.
Ernesto Herrera Guerra, director general de Reforestemos México AC, mencionó que el sector forestal nada contracorriente, por eso es que aporta tan poco a la economía y al desarrollo social, por lo que propuso fortalecer a las empresas maderables responsables con el medio ambiente y otorgarles incentivos fiscales.
Añadió que una tarea pendiente del Congreso es terminar con el tráfico ilegal de la madera y crear instituciones sólidas que fortalezcan la salvaguarda de los bosques en el país; es decir, que el tema se vea de forma transversal.