Bruselas.- El Parlamento Europeo (PE) no logró un consenso suficiente para proponer la creación de un visado climático como medida de protección temporal para las personas desplazadas por la crisis climática, debido al voto en contra de los tres grupos de la derecha del hemiciclo y la abstención de Verdes y la Izquierda.
Finalmente, los únicos grupos que votaron mayoritariamente a favor de la propuesta fueron los socialdemócratas y los liberales de Renovar Europa, con lo que la propuesta no salió adelante tras recibir 255 votos a favor, 260 en contra y 170 abstenciones.
El texto, impulsado por la diputada socialista española Mónica Silvana, recogía la propuesta de un nuevo visado humanitario en el nuevo pacto europeo sobre migración para proporcionar una vía legal de entrada a aquellas personas que se han visto obligadas a huir de su país por ser inhabitable debido al cambio climático.
La migración por causas climáticas afecta principalmente a la población más vulnerable, como los pueblos indígenas, un fenómeno que, según el Banco Mundial, sumará 143 millones de personas que deberán huir de sus hogares debido al calentamiento global de aquí a 2050.
Según Silvana, al ser la Unión Europea uno de los actores que “más ha contribuido al calentamiento global”, la propuesta hubiera supuesto una compensación del daño "a los países que menos han contribuido y que más necesitan ahora nuestro apoyo”, afirmó en referencia a los territorios que más están sufriendo los efectos adversos del cambio climático.
Derecha en contra, verdes e izquierda se abstienen
El acta final del voto recoge que la gran mayoría de los diputados del Partido Popular Europeo, los conservadores y reformistas y la ultraderecha de Identidad y Democracia han votado en contra de la propuesta, mientras que una amplia parte de la bancada de los Verdes y la Izquierda se ha abstenido.
Fuentes de ambos grupos apuntan a varias enmiendas al texto que fueron impulsadas por el grupo popular como la causa de su abstención, ya que, a su juicio, la inclusión de estas modificaciones en la propuesta final rebajaba demasiado el tono del reclamo.
Las enmiendas eliminaban, por ejemplo, el "reconocimiento de la migración inducida por el clima como motivo reconocido legalmente para la concesión de asilo" o la solicitud directa a la Comisión Europea y a los Estados miembros de que consideren "la destrucción de los medios de subsistencia inducida por el cambio climático como un criterio de admisibilidad para la protección humanitaria".
En un comunicado después del anuncio del voto, la eurodiputada española tildó de vergonzoso que populares y verdes “se hayan alineado para no sacar adelante la aprobación de un visado humanitario por causas climáticas” y criticó tanto las "posturas maximalistas" del grupo ecologista que han llevado a su abstención como que la derecha de la Eurocámara se haya posicionado “en contra de las personas vulnerables, en contra de los países en desarrollo y en contra de actuar contra el cambio climático”.