Logo Persis

México requiere un sistema integral de reciclaje de residuos

México requiere un sistema integral de reciclaje de residuos

De acuerdo con expertos, el exceso de regulaciones y la ausencia de una promoción para que los consumidores evidencien los beneficios de los envases reciclados imposibilitan que haya en México un mejor reciclaje de residuos.

México.- La Ley General de Prevención y Gestión Integral de Residuos que se publicó en 2003 ha fallado en su implementación, sin embargo puede perfeccionarse, señaló la especialista en gobernanza ambiental Sandra Herrera, asesora principal en gobernanza ambiental de la Cooperación Alemana para el Desarrollo Sustentable en México

El acopio de residuos obtenido en México es muy altos, sin embargo, no se ha creado un sistema para que los residuos se convierta en nuevos productos.

Además, "cuando alguien quiere abrir un centro de acopio en un municipio o alguna ciudad, no existe un uso de suelo que le permita abrir el centro de recogida, ya que este no se califica ni como una industria ni como un basurero".

Herrera señala que esto "genera corrupción y desincentiva que exista esta actividad económica de manera formal".

"Es muy importante que desde la Secretaría de Economía se reconozca como una actividad específica el acopio de los residuos", añadió.

En los últimos 10 años México ha pasado de una tasa de reciclaje del 12 por ciento de los plásticos a un 25 por ciento aproximadamente, sostuvo el presidente de la sección de recicladores de la Asociación Nacional de Industrias del Plástico (Anipac), Eduardo Martínez.

"Y en poco tiempo se llegará al 40 por ciento en los niveles de reciclaje de plástico", añadió.

Los envases fabricados con materiales tienen colores pardos o negruzcos, y son menos atractivos a los ojos del consumidor.

La preferencia de los consumidores por los colores claros a la hora de comprar productos obstaculiza que se reciclen más plásticos.

Cuanta más cantidad de material reciclado contiene el producto, el color es menos vistoso y, por lo común, obtiene menos ventas.

Por tal motivo, el consumidor debe tomar conciencia de que "existe un valor ecológico en comprar un producto con material reciclado. Ello supone sacrificar algo y en este caso es la apariencia", sostuvo.

Muchos productos están hechos con materiales reciclados del plástico: sillas de jardín, cubos de basura, utensilios de cocina, juguetes y material de limpieza como escobas.

"¿Qué importa que una escoba sea blanca o negra, si funciona igual?", cuestionó Martínez.

Sin embargo, las empresas, a sabiendas del gusto del consumidor, condicionan su producción ofertando lo que más consume.

Para solucionar el problema, Martínez propuso que alguna normativa para que ciertos productos lleven un contenido mínimo de plástico reciclado.

Aún con inconvenientes, México tiene un potencial altísimo para generar que las empresas reciclen, pues las cantidades de acopio son inmensas.

Pero es necesario que se aplique la regla de "hacer nuevos productos que tengan un porcentaje de fabricación proveniente del reciclaje", una exigencia que sí imponen algunas normativas de la Unión Europea (UE).

Si México quiere caminar hacia una economía circular, debe implementar y cumplir este tipo de exigencias.

Las intenciones del nuevo Gobierno van en esa dirección, pues han declarado su objetivo de residuos cero.

Otro tema de debate sobre reciclaje que pone en conflicto a autoridades y empresarios es el de la responsabilidad compartida y la responsabilidad extendida.

En la regulación actual se reconoce una responsabilidad compartida del productor sobre los residuos, donde las autoridades son las que realizan la recolección, tratamiento y disposición de los residuos.

La responsabilidad extendida del productor radica en que las empresas "también tendrían que hacer suyo el problema de los residuos e invertir en investigación para fabricar nuevos productos procedentes del reciclaje".

Sin embargo, Sandra Herrera destaca que existen algunos "ejemplos valiosos" en los que las empresas invirtieron en reciclaje.

Entre ellas citó a la Industria Mexicana de Coca-Cola (IMCC), que actualmente es el principal reciclador de Tereftalato de polietileno (PET) de grado alimenticio en el país puesto que del 56 por ciento que se acopia en México, la empresa representa el 35 por ciento.

Sus plantas PetStar e IMER tienen la capacidad para que anualmente se procesen más de 85 mil toneladas de este material y el 43 por ciento del portafolio de la empresa son empaques retornables.

La Industria Mexicana de Coca-Cola tiene como principal objetivo el alcanzar la meta 'Mundo sin Residuos', trazada a nivel global para recolectar y reciclar el equivalente al 100 por ciento de sus envases vendidos para 2030.

Por su parte, el director de la Comisión de Estudios del Sector Privado para el Desarrollo Sustentable (Cespedes), José Ramón Ardavín, expuso que existen áreas de oportunidad en las que se pueden mejorar las cosas.

Tal es el caso de la infraestructura, la cual "no cabe duda que falta", desde botes de basura a vehículos.

Cargando...
Load next